Las buenas prácticas agrícolas (BPA) son un conjunto de principios y técnicas que buscan optimizar la producción de alimentos de manera sostenible y segura. Estas prácticas promueven el uso eficiente de los recursos naturales, la protección del medio ambiente y la mejora de la salud de los trabajadores y consumidores. Su implementación es clave para una agricultura responsable y resiliente.