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El Sunzal es una comunidad costera que se localiza en el municipio de Tamanique, departamento de La Libertad, El Salvador.
Descripción de la comunidad[edit | edit source]
La comunidad de El Sunzal está ubicada en el cantón El Sunzal, dividida en los catones: Caña Brava, El Ranchón, Izcanal; la comunidad se fundó hace más de 60 años, actualmente viven un aproximado de 700 familias.
Respecto al acceso a servicios básicos, a pesar de que la comunidad cuenta con chorros y tuberías conectadas al servicio de agua, ésta no cae constantemente, sino una o dos veces al mes, lo que obliga a las personas a ocupar el agua proveniente del río, además de comprar pipas y agua embotellada para suplirse del vital líquido. Por el contrario, la energía eléctrica tiene conectividad en toda la comunidad.
La comunidad se lidera con una junta directiva y por medio de esta organización se han logrado enlaces directos con la alcaldía de Tamanique, para el desarrollo de varios proyectos, también se ha logrado el apoyo de otras organizaciones como USAID para el fortalecimiento de la educación de las y los jóvenes de la comunidad.
Características relevantes[edit | edit source]
Al consultar con las personas participantes sobre las características de la comunidad, se logró identificar que en su mayoría son grandes grupos familiares los que viven en los terrenos, cuyos principales medios de vida están involucrados con la pesca, el sector agrícola y el comercio, sin embargo, son empleos rotativos, viéndose afectados por la temporalidad de los trabajos.
Los accesos para el transporte dentro de la comunidad son distintos, debido a la gran cantidad de habitantes, en las calles principales circula el transporte colectivo, en las secundarias pick ups y mototaxis u otros transportes privados, sin embargo, las calles son en su mayoría de tierra, piedras y desechos que se acumulan por la corriente del río. Con respecto a la relación de los servicios básicos en la comunidad, la energía electricidad está presente en su totalidad dentro de la comunidad; sin embargo, el flujo de agua potable no es constante, llegando a las viviendas un par de veces al mes, por lo que, se ven obligados las y los habitantes a hacer uso del agua proveniente del río cercano para las tareas del hogar, también se suministran con barriles de pipas con agua, de igual manera, deben de adquirir agua embotellada para consumo familiar, a su vez, en invierno también las familias ocupan el agua proveniente de la lluvia.
La situación habitacional es bastante precaria ya que al menos un 30% de las viviendas de la comunidad están hechas de materiales como adobe, bahareque y lámina, siendo viviendas poco habitables.
Entorno de la comunidad[edit | edit source]
- La Delegación de la Policía Nacional Civil (PNC) más cercana se encuentra a 1.5 kilómetros de distancia.
- La clínica o unidad de salud más cercana está ubicada a 7 kilómetros de distancia.
- El hospital más cercano, en este caso, Hospital Nacional San Rafael se encuentra a 30 kilómetros en Santa Tecla.
- Las escuela pública más cercanas se encuentran dentro de la comunidad a 500 metros.
- La Alcaldía Municipal se encuentra a 17 kilómetros de distancia.
- No tienen cancha deportiva, ni otros espacios de recreación.
- No cuentan con casa comunal.
Historia de la comunidad[edit | edit source]
La comunidad Cantón El Sunzal, según mencionan sus habitantes, recibió a las primeras personas en la década de 1980. La toma de posesión de las tierras se realizó de manera organizada y sin ningún tipo de conflicto con los terratenientes dueños de las tierras.
Menos del cincuenta por ciento de los y las habitantes de la comunidad poseen un documento legal que respalde su posesión sobre sus propiedades; las familias restantes no conocen, ni están seguros de saber, quienes son los dueños de los terrenos que habitan.
Al comenzar a residir en la zona, las y los habitantes le dieron el nombre de Cantón El Sunzal, debido a que en ese tiempo existía una gran cantidad de árboles de Sunza, lo cual era particular en la zona.
Período de covid y afectaciones por tormentas tropicales en la comunidad[edit | edit source]
Durante la pandemia de COVID-19, las y los habitantes se encontraron en una situación de incertidumbre y precariedad, debido al cierre del sector comercio y turismo. Muchos de las y los habitantes no registraron ningún tipo de ingreso en un largo periodo de tiempo, se vieron imposibilitados a seguir laborando, y no podían solventar las necesidades familiares.
Sin embargo, la comunidad fue beneficiada con la ayuda de varias organizaciones quienes dieron apoyo en víveres. Organizaciones como PROSURF, la Alcaldía Municipal de Tamanique, Plan Internacional de El Salvador, entre otras.
Con respecto a las tormentas Amanda y Cristóbal, que se registró durante mediados de año del 2020, la comunidad se vio muy dañada por las inundaciones, (afectando viviendas, negocios y bienes materiales), provocando la interrupción del servicio eléctrico por tres días, y obligando a familias completas a evacuar y dirigirse a los albergues más cercanos.
Si bien ya había afectado enormemente a nivel local la pandemia, los temporales, vinieron a agravar y a visibilizar la situación de precariedad en las que vivían muchas de estas familias.
Organización Comunitaria[edit | edit source]
La comunidad Cantón El Sunzal está organizada por medio de una junta directiva, quienes fueron electos a mano alzada en una asamblea general de vecinos. La junta directiva es la responsable de la coordinación y gestión de proyectos en desarrollo de la comunidad; hasta la fecha ha logrado el establecimiento de enlaces con la Alcaldía Municipal de Tamanique, así como con organizaciones como USAID, Plan Internacional y organizaciones locales.
Entre los proyectos que se han realizado en la comunidad están:
- Construcción de Centro Educativo junto a USAID.
- Implementación de proyectos con Plan Internacional de El Salvador.
Amenazas o zonas de riesgo de la comunidad[edit | edit source]
La comunidad está expuesta a distintas amenazas, una de las principales es el desalojo, debido a que la mayoría de familias no poseen documentos que legalicen su posesión sobre los terrenos que habitan, por lo que se ha convertido en el peor temor de muchos vecinos y vecinas el ser desalojados de sus viviendas y perder todas sus pertenencias. Este mismo motivo justifica la situación de precariedad de varias viviendas que al no tener ningún papel que respalde su tenencia sobre la tierra, prefieren construir con materiales desmontables.
De igual manera, los terrenos al estar ubicados en la zona costera, están en constante riesgo de inundaciones y tsunamis, siendo directamente afectados por el oleaje del mar y la variabilidad del clima. Adicional, se suma la contaminación generada por los desechos propios de la comunidad, y los turísticos, que afecta al río, y al suelo de la comunidad.
Interacciones con cuerpos acuáticos[edit | edit source]
La comunidad en su cercanía tiene la playa El Sunzal y el río Sunzal, que en tiempo de invierno crecen y provoca inundaciones. Para reducir este problema la comunidad, con la ayuda de otras organizaciones, han ideado un plan estratégico de evacuación, este identifica las rutas de evacuación y los albergues más cercanos, como la iglesia de la comunidad.
El cantón cuenta con un sistema de alerta temprana, la cual advierte a las y los habitantes de la posibilidad de tsunamis en la zona. Esta alerta es responsabilidad del Comité de protección civil de la comunidad.
Relación de la comunidad con el agua[edit | edit source]
La comunidad al no tener servicio de agua constante, debe buscar el medio para obtener agua para los oficios básicos del hogar y sus actividades económicas y de comercio, es por ello, que hacen uso del agua del río para las actividades de lavado de prendas, recreación, actividades económicas e incluso para cocinar.
El agua que reciben en los hogares, a pesar de ser catalogada como "potable", los residentes han comprobado que no es así, debido a que esta presenta un sabor, color y olor poco habitual, siendo no segura de consumir. Con razón a esto, las y los habitantes buscan el obtener agua potable por medio de la compra de agua embotellada o fardos con agua a los camiones repartidores, y si no, hirviendo el agua del río para su ingesta.
Principales retos[edit | edit source]
La principal problemática, que manifiestan las y los habitantes, es no contar con un servicio de agua potable residencial de calidad. El agua potable es un tema urgente en esta comunidad por las implicaciones económicas que conlleva la compra de agua semanal, generando un gasto muy grande que muchas familias no se pueden permitir.
La comunidad también presenta la dificultad de las letrinas aboneras, ya que, al no contar con un servicio de tratamiento de aguas negras, todos los desechos se acumulan y terminan en las calles o el río, afectando así la pureza del agua y todas las actividades que se realizan con esta.
Otro reto que presenta la comunidad son las constantes inundaciones por el río cercano y la zona costera, siendo afectados con cada temporal.
Además no poseen una clínica comunitaria en buen estado.
Sueños, metas y esperanzas[edit | edit source]
- Acceso de calidad a agua potable y residencial para toda la comunidad.
- Sistema adecuado de tratamiento de desechos y aguas residuales.
- Clínica comunitaria en buen estado.
- Obtención de escrituras que legalicen su tenencia sobre la tierra.
- Viviendas en mejor estado.
- Mejores oportunidades de empleo y educación.
Mapeo de soluciones[edit | edit source]
Durante la segunda actividad, "Mapeo de Soluciones" se levantó una encuesta que profundizó en el acceso y calidad de agua potable, siendo seleccionada para eso, una muestra de 29 familias, distribuidas en las tres zonas que conforman la comunidad. Los resultados se presentan a continuación.
Acceso y calidad de agua potable[edit | edit source]
El sistema de distribución de agua que tiene la comunidad El Sunzal, se construyó hace aproximadamente 60 años y solo abastece a las viviendas que en ese momento estaban en la comunidad, sin preverse el aumento de las viviendas y familias. Según las diversas instituciones que han realizado estudios sobre el agua en la zona, esta se encuentra con altos grados de contaminación, por lo que más del 80% de las familias de la comunidad optan por comprar agua potable a los repartidores y ocasionalmente hierven el agua contaminada para poder consumirla, debido a que el gasto en el caso de comprarla ronda hasta $10 semanales, dependiendo el número de habitantes por familia. El agua que reciben por medio de la cañería solo la reciben por un aproximado de dos horas al día, y a veces llega con presión baja que no permite su correcta recolección, obligando a las familias a utilizar otras fuentes de agua para uso doméstico e incluso, a la compra de la misma a otras comunidades.
Según las familias encuestadas, un poco más de la mitad de la población en la comunidad El Sunzal tiene acceso al agua domiciliar.
Gráfico 1: ¿Dispone de agua potable para beber y cocinar en su vivienda?
De acuerdo a la encuesta realizada con 29 familias de la comunidad El Sunzal, el 55,2% de estas afirman que sí disponen de agua potable para consumo y usos domésticos; mientras que el 37,9% dice que no cuentan con este servicio básico, y un 6,9% se reservó su respuesta. Pese a que la comunidad se encuentra rodeada de fuentes varias de agua, estas no se encuentran calificadas como aptas para el consumo y tampoco se consideran adecuadas para los oficios del hogar debido a la alta contaminación, sin embargo, la necesidad de los habitantes los obliga a utilizarla para el aseo personal y lo usos domésticos, poniendo en riesgo su salud, los resultados de esta gráfica también muestran los grados de desigualdad que existe en la zona.
Gráfico 2: Pensando en la frecuencia con que se obtiene el agua para beber y cocinar, ¿se satisfacen las necesidades del hogar?
El grado en que el acceso al agua potable satisface las necesidades del hogar, teniendo en cuenta la frecuencia con la que tienen acceso a esta, para este fin se le presentó a la población 4 categorías que permiten conocer hasta qué punto estas necesidades son satisfechas, al respecto, 7 de los representantes de las diferentes familias afirmaban que la mayoría de las necesidades se satisfacen con el acceso actual al agua, mientras que 11 consideran que poco se satisface, y 11 más afirman que casi nada se satisface con el acceso actual. Cabe mencionar que debido a esta situación, la mayoría de las familias se ven obligadas a comprar el agua lo que implica un gasto extra que no todos pueden costear.
Gráfica 3: ¿De dónde obtiene el agua para beber?
Como se mencionó en el gráfico anterior, el hecho de que el acceso al agua no satisface las necesidades de la población, les obliga a adquirirla por diferentes medios. De acuerdo a los resultados de la encuesta, el 76,5% de la población compra fardos, botellas, garrafones, y otras presentaciones que ofrecen los diferentes repartidores; el 8,8% la obtiene de vertientes; el 5,9% de pozos; oro 5,9% de alguna cañería residencial; y el 2,9% la obtiene de ríos.
Gráfico 4: Antes de consumir el agua, ¿utiliza algún método de purificación?
Debido a las diferentes formas en que la comunidad obtiene el agua, también se le consultó si utilizaban algún método de purificación y las respuestas fueron las siguientes: el 50,0% de la población no utiliza un método de purificación del agua antes de consumirla, hecho que pone en riesgo la salud de todos los miembros de la familia por la alta contaminación de algunas fuentes de agua como ríos y vertientes; por otra parte, el 23.3% hierve el agua antes de consumirla y de esta forma eliminar un porcentaje de sustancias nocivas para el cuerpo; el 13.3% filtra el agua con el mismo propósito; el 6,7% usa Pastillas para purificar el agua; y finalmente, otro 6,7% utiliza otros métodos de purificación con peces y gotas de lejía.
Debido a las diferentes formas en que la comunidad obtiene el agua, también se le consultó si utilizaban algún método de purificación y las respuestas fueron las siguientes: el 50,0% de la población no utiliza un método de purificación del agua antes de consumirla, hecho que pone en riesgo la salud de todos los miembros de la familia por la alta contaminación de algunas fuentes de agua como ríos y vertientes; por otra parte, el 23.3% hierve el agua antes de consumirla y de esta forma eliminar un porcentaje de sustancias nocivas para el cuerpo; el 13.3% filtra el agua con el mismo propósito; el 6,7% usa Pastillas para purificar el agua; y finalmente, otro 6,7% utiliza otros métodos de purificación con peces y gotas de lejía.
Mapeo de soluciones[edit | edit source]
Durante esta etapa se reconoció las ideas de los y las pobladores con respecto al acceso, recolección y almacenaje del agua, así como también, prevención a los posibles riesgos, y se encontró varias soluciones ante la problemática del acceso y calidad del agua que en la actualidad se están implementando, como:
- Utilización del río para aseo personal y tareas domésticas.
- Construcción de pozos familiares (con y sin bomba).
- Almacenaje de agua en recipientes reutilizados.
- Compra de agua a otras comunidades.
- Compra de agua a empresas distribuidoras de agua.
- Hervir el agua para consumo.
